En redes sociales se ha viralizado una insólita conversación entre un vendedor de miel y un cliente que estaba interesado en comprar su producto.
Al parecer, el cliente tenía dudas de si la miel que iba a comprar era natural, por lo que le preguntó al vendedor y este, en vez de darle largas explicaciones, decidió enviarle una fotografía en la que se ve su ojo completamente inflamado debido a una picadura de abeja.
El vendedor con su ingeniosa respuesta le demostró brevemente al cliente que el producto que vende es realmente auténtico.
