La cámara de resolución de la Comisión de Ética de la FIFA decidió suspender a perpetuidad al expresidente de la Confederación Brasileña de Fútbol, CBF, José María Marín, quien fue condenado a cuatro años de cárcel en Estados Unidos el pasado mes de agosto por su implicación en el caso de corrupción del órgano rector del deporte rey.
Así fue confirmado este lunes 15 de abril, al considerarse que Marín incumplió el artículo 27 del Código Ético del organismo, el cual es relativo a la aceptación de sobornos, por lo que fue inhabilitado para ejercer cualquier actividad relacionada con el fútbol tanto a nivel nacional como internacional y le impuso una multa de un millón de francos suizos.
Como se recordará, el exdirigente fue objeto de investigación al ser vinculado a posibles de corrupción durante el periodo 2012-2015 por su papel en la concesión de contratos de derechos audiovisuales de competiciones de la Conmebol, Concacaf y la CBF.
Por ello, José María Marín fue detenido en Suiza en mayo de 2015 junto a otros directivos de la FIFA, dentro del llamado «FIFA Gate» y extraditado a Estados Unidos, donde permaneció en arresto domiciliario tras pagar una importante fianza a la espera del juicio.
Pese a que el exdirigente brasileño se declaró no culpable, fue condenado en agosto del año pasado a pena de cárcel por seis cargos de conspiración y blanqueo de dinero.