Junior de Barranquilla y Deportivo Pasto lograron, la noche de este miércoles, avanzar a la gran final del Fútbol Profesional Colombiano, FPC, donde definirán quién alzará el título del Campeonato Apertura 2019.
Los tiburones lograron sellar su clasificación tras derrotar 3-2 a Atlético Nacional en el gramado del Atanasio Girardot y llegar a 12 unidades, que sirvieron para que fuera el líder del Grupo B de los cuadrangulares semifinales, aunque con angustia porque en el otro partido el Deportes Tolima le ganó 2-1 al Cali y llegó al mismo número de puntos, pero por diferencia de goles, el cupo fue para el cuadro rojiblanco.
Por su parte, el cuadro volcánico que ha sido la sorpresa del campeonato por su excelente campaña bajo la dirección de Alexis García, se ganó su tiquete a la final luego de golear 3-0 al Unión Magdalena y liderar la zona A al alcanzar los 13 puntos, dos más que Millonarios que perdió 2-1 en ‘El Campín’.
Junior, que es el actual campeón del rentado local, buscará su novena estrella, otra vez de la mano de Julio Comesaña, quien llegó en la recta final de la temporada, en reemplazo de Luis Fernando Suárez. Mientras que Pasto va en busca de su segunda estrella, la primera y única, hasta ahora, se la ganó al Deportivo Cali, en el 2006.
Con respecto a la programación de los juegos de ida y vuelta de la final, este tema se ha tornado un poco polémico teniendo en cuenta que Deportivo Pasto tiene una limitación con su estadio y, además cerrará como local; sumado al curioso pedido de Comesaña de querer jugar también a las 3:30 p.m. en Barranquilla si los nariñenses hacen lo propio en Ipiales.
No obstante, Dimayor anunció que el primer duelo se llevará a cabo el próximo sábado 8 de junio a las 7:30 de la noche en el estadio Metropolitano de Barranquilla, y el de vuelta será el miércoles 12 del mismo mes aunque todavía no tiene sede ni horario definidos.
En las toldas pastusas esperan por la visita de comisionados de Dimayor y Conmebol para que den una apreciación sobre la posibilidad de jugar la final en el estadio de Ipiales; en caso de que la decisión sea negativa, podría jugarse en Bogotá o Cali.