El Representante a la Cámara, Jorge Burgos, más conocido en el municipio de Lorica, como el ‘Titi’, es la apuesta política más fuerte que tiene en la actualidad de la casa Jattin.
De acuerdo con el portal Colombiacheck, la familia loriquera de la cual siempre fue líder la excongresista Zulema Jattin, quien se encuentra en prisión domiciliaria desde 2009, por parapolítica, recurrió a los Burgos, para no perder su caudal político.
Según el portal mencionado, los Jattin no tenían «postor» para las elecciones legislativas que se celebraron el pasado mes de marzo, por lo que su apoyo se centró en el ‘Titi’ Burgos, quien finalmente resultó electo representante en el Congreso por el partido de la U, último en el que militó Zulema.
El caudal político de la poderosa familia jatinista, habría empezado con el partido liberal, con el padre de Zulema, José Jattin Safar, quien fue presidente de la Cámara de Representantes en 1994, pero que más adelante fue destituido por investigaciones en su contra en el proceso 8000.
Dentro de los pioneros del grupo familiar político, también se encuentran los hermanos de José Jattin: Rubén, quien fue el primer alcalde por elección popular de Santa Cruz de Lorica, entre los años 1988 y 1990, y Félix Manzur Jattin, que también fue mandatario municipal entre 1991 y 1992, actualmente funge como presidente de la Cámara de Comercio de Montería.
Pero la relación de los Jattin con la familia Burgos, se haría explícita inicialmente con un hermano de Zulema, Francisco Jattin, quien fue alcalde del municipio loriquero en el periodo de 2012 – 2015, y dentro de su equipo tuvo al abogado Álvaro Burgos, este último capturado en 2015 por el llamado «carrusel de la educación», un desfalco al sector por más de 100.000 millones de pesos, así lo señala un análisis de la Fundación Paz y Reconciliación.
El abogado Burgos, es padre de Carlos Burgos, expresidente de la Asamblea Departamental de Córdoba, quien además según el informe de Colombiachek, es aliado de Zulema Jattin, porque le realizó campaña política a Nancy Sofía ‘Choffi’ Jattin, actual alcaldesa de Lorica y prima de Zulema.
Padre e hijo, son familiares de Jorge Enrique ‘Titi’ Burgos, Representante a la Cámara, para el periodo 2018 – 2022, y la ficha del clan Jattin, luego que su anterior apadrinado político Martín Morales, fuera capturado hace dos años por el delito de homicidio y por estar relacionado con grupos al margen de la ley.
Campaña del ‘Titi’ habría sido auspiciada por varios contratistas del Estado
La investigación de Colombiacheck, asegura que el ‘Titi’ para lograr los 60 mil 253 votos que le aseguraron su curul en el Congreso, necesitó ocho créditos de siete ‘aportantes’, a parte del aval que tuvo por parte del partido de la U y de la poderosa familia cuestionada del bajo Sinú.
«Aparte de los 71’000.000 propios y de sus familiares, los 255’000.000 de pesos de los aportantes, principalmente representantes legales de empresas de diseño y publicidad, se destinaron a la promoción del candidato. Se destacan montos como los 97’600.000 pesos que le prestó Amín Salín Díaz para el suministro de pasacalles y murales estampados, los 56’470.000 de Francisco Carlos Ríos en concepto de publicidad y los créditos de 30’000.000 de Hernando Enrique Padilla para perifoneo y de Darío José Oviedo también para publicidad», se lee en el escrito de Colombiachek.
La investigación también especifica que de los siete financiadores externos de la campaña de Burgos, cinco han sido contratistas del Estado, específicamente con instituciones locales y departamentales.
El mayor financiador, que habría sido Salín Díaz, logró contratar este 2018 con la administración de Puerto Escondido, para instalar una valla para un evento cultural, por un monto de 21’500.000 pesos.
Mientras, que Oviedo, en 2017 sería el representante legal del Consorcio Infraescolar Lorica, contrato que estaba por una suma de 5.249’660.000 pesos y que al parecer era para la construcción de varias instituciones educativas en Lorica.
Ríos, también contrató cinco veces entre 2016 y 2017 con la unción Jattin pero con fines publicitarios, por una suma total de 111’993.500 pesos.
Finalmente, Hernando Enrique Padilla, logró un monto de 32’200.000 pesos, por tres contratos a nivel departamental entre 2015 y 2018, por concepto de prestación de servicios como monitor de béisbol.