Una mujer denunció que en la capital del Vallenato, se estarían vendiendo dulces llenos de escopolamina.
Según narra la víctima, mientras hacia una diligencia personal en el sector 5 esquinas, ubicado en el centro de Valledupar, un hombre que al parecer era venezolano, se le acercó y le ofreció unos dulces que estaba vendiendo.
La mujer inmediatamente se negó a comprar el producto, ante la negativa el hombre insistió en repetidas ocasiones que tomara el producto, al ver que no obtendría una respuesta positiva, destapó una caja y abrió un dulce tipo “chupeta”.
Paralelo a esto la víctima, siguió su camino mientras comenzaba a sentir múltiples malestares, como mareos y pérdida de visión, fue entonces cuando aceleró el paso porque se dio cuenta que el sujeto estaba siguiendo.
Por fortuna la perseguida logró llegar rápidamente a lugar de trabajo de un familiar que estaba cerca y logró ser auxiliada, posteriormente fue llevada a la Clínica Valledupar, donde aún permanece internada.
Los médicos, señalaron que la mujer sufrió una sobredosis de escopolamina lo que le produjo taquicardia, pérdida de visión, ardor en los ojos y dificultad para respirar. Actualmente el estado de salud de la paciente es estable.