Debido a la escasez de harina y falta de dinero que vive el pueblo venezolano, ha perjudicado incluso la comunión de los feligreses, pues las iglesias del país hermano garantizan la comunión por falta de hostias.
Colombia decidió donar más de 200 mil hostias a las iglesias como un gesto solidario frente a la problemática que actualmente están enfrentando los venezolanos.
La donación la hizo la Diócesis de Cúcuta de 250.000 hostias a la Iglesia Católica de Venezuela desde el Jueves Santo.
La donación contribuyó a que los creyentes tuvieran la oportunidad de celebrar “los misterios centrales” de la Semana Santa.