Un niño muerto y otros tres heridos dejó el impacto de un rayo que cayó cuando jugaban un partido de fútbol en medio de la lluvia en zona rural del Río Iró, en Chocó.
Dailer Andrade tenía 12 años y murió haciendo lo que más le gustaba, jugar fútbol. Su vida se esfumó al ser impactado por un rayo que cayó en medio de una tormenta.
El subgerente del hospital San Francisco de Asís, Manuel Ruíz, explicó los daños que sufrió internamente el menor y que lo llevaron hasta la muerte, “el rayo lo que hace es viajar por toda la fibra nerviosa y lo que hace es dañar todo lo que es la parte muscular, entonces genera infartos masivos, daño masivo de los órganos, los quema y eso es lo que produce a nivel interno”.
Uno de los sobrevivientes de la tragedia fue Luis Santiago García, y contó como ocurrió todo cuando cayó el rayo, “cayó el rayo y todos quedamos en la cancha tirados, y ahí nos dimos cuenta que se estaba muriendo un amigo de nosotros y que otros dos quedaron inconscientes”.
El padre del menor sobreviviente, por su parte contó que la comunidad en medio de la desesperación enterró por más de 20 minutos a los heridos, según ellos, para sacarle la energía recibida tras el impacto.
“Esto es importante cuando una carga eléctrica le cae a la persona, pues siempre hay esa recomendación que uno lo entierre un rato en la arena o en el barro” aseguró.
Finalmente, se conoció que de los tres heridos trasladados al hospital San Francisco de Asís en Quibdó, solo uno continúa en observación médica. “Hay que hacerle seguimiento específicamente por esos de las funciones renales y verificar que no haya tenido complicación específicamente de eso o a nivel cardíaco” concluyó el subgerente del centro asistencial.