Últimamente a los alumnos de la institución educativa Isabel La Católica, sede la primaria, ubicada en el barrio Colón de Montería, no les ha ido bien. Hace una semana sufrieron inundaciones por un fuerte aguacero y hoy padecen otra calamidad, ya que el transformador que suministra energía eléctrica al plantel educativo se quemó y los niños reciben clases sin el servicio.
Según manifestaron algunos padres de familia y docentes del plantel educativo, ya llevan varios días en esas condiciones, aseguraron que solamente hay fluido eléctrico en cuatro salones del colegio y en cada uno les ha tocado “apilonar” hasta 45 niños.
“Como solo hay luz en cuatro salones nos toca dividirlos y agrupar ese poco de niños en las aulas, pero ese calor es insoportable. Nosotros venimos de un paro nacional y no podemos seguir perdiendo más clases, nosotros vivimos en Montería y usted sabe las altas temperaturas que se dan aquí son muy fuertes y eso que es en la mañana, ¿ahora que tal en la tarde?”, señaló una docente de la Institución.
En horas de la mañana, todos los niños hicieron un plantón educativo para protestar pacíficamente, dibujaron pancartas en los salones, gritaron consignas y hasta cantaron versos vallenatos para que la Secretaría de Educación municipal los escuche.
Manuela Daguer Martínez, docente del colegio, dijo qué, “este es un colegio tradicional de Montería que arroja excelentes estudiantes, pero que hoy nos veos en condiciones muy precarias por esta situación, no tenemos fluido eléctrico porque el transformador se quemó y fuera de eso, cada vez que llueve nos inundamos. Le agradecemos a las instituciones encargadas que nos ayuden a solventar esta situación porque no es justo que nuestros estudiantes se vean perjudicados con esto”.
Angélica Murillo, madre de familia de un estudiante, manifestó que también los alumnos de bachillerato se han visto más afectados por el calor, ya que ahora están recibiendo clases en dicha sede en la jornada vespertina porque la sede principal está siendo remodelada.
Este medio intentó comunicarse en repetidas ocasiones con la Secretaría de Educación Municipal y Departamental pero ninguna de las dos dependencias responde las llamadas.