¿Y si damos un paso atrás?

¿Y si damos un paso atrás?

Hector LópezPor: Héctor A. Enríquez López

Twitter: @HectorEnriquezL

En la vida a veces hay que dar un paso atrás para después dar dos adelante. Esta frase es contundente, precisa y sencilla, es una frase que resume los consejos que podríamos darle a la mayoría de jugadores de nuestro país que militan en el fútbol internacional y que hoy por hoy están relegados a un segundo plano dentro de la máxima estratósfera futbolística internacional.

Recordemos aquel grato sábado 14 de junio de 2014, Colombia, nuestra Selección Colombia jugaría su primer partido en un Mundial de fútbol después de 16 años, un equipo con buenos jugadores para nuestro criterio pero desconocidos para la élite mundial, lejos estábamos en nómina de Alemania, Holanda, Italia, Argentina o Brasil, los siempre llenos de “estrellas”.

Entristeció y sembró dudas el hecho de no tener en concentración al máximo referente de nuestro país por esos días, Falcao, quien fuera marginado del listado de convocados por no alcanzar a recuperarse totalmente de la grave lesión que sufriría en enero del mismo año.

En nuestro equipo estaban presentes Ospina, James, Cuadrado, Armero, Zúñiga, Guarín, Aguilar, Ramos y un par de buenos jugadores más. Transcurrió el Mundial y con la gran presentación del equipo tricolor, se especuló y se visualizó un alentador futuro para “los nuestros” a nivel internacional; en efecto cambiaron de equipo los antes mencionados, James pasó a ser el 10 del Real Madrid, ¡EL REAL MADRID! Ese tal vez fuera el sueño infantil de todo niño latinoamericano, portar ese número en la legendaria institución española.

Ospina, “el gran David” pasaba a ser guardameta del Arsenal inglés, el mismo Arsenal donde pasaran figuras como Dennis Bergkamp, Thierry Henry, Robert Pires, Jens Lehmann y otros, ahora sería la casa de nuestro portero.

De los otros jugadores mencionados mucho se especuló, que llegarían al Barcelona, al Milán, a Juventus, a Inter de Milán, al Manchester United, pero la realidad es que muy pocos lograron recalar en un equipo histórico.

Hoy todos ellos, salvo Juan Guillermo Cuadrado no gozan de un buen presente en sus clubes, algunos como Armero y Adrián Ramos incluso han venido a la baja y han recalado en equipos menos impactantes que donde llegaron a jugar, el primero en Brasil y el segundo en un equipo que lucha por no descender en la Liga Española.

James, el ídolo de la actual Selección Colombia no es del gusto del técnico de “la casa blanca”, Zinedine Zidane (a quien admiro como jugador pero reprocho como entrenador), manifiesta escuetamente que es un jugador importante, lo que tal vez James no entiende es que es un acaparador, lo mismo manifestó de Isco cuando este anunció que no renovaría con el Madrid.

Ospina es elogiado constantemente por su técnico Arsene Wenger, pero de igual manera ha sido relegado al banco de suplentes después de una espectacular campaña. Si un entrenador se siente seguro con un guardameta, ¿para qué busca en el mercado un nuevo arquero titular?, considero que tanto James como Ospina deben buscar nuevos rumbos pronto, antes de que su fútbol termine apagado y la Selección Colombia termine perjudicada por la falta de continuidad de sus mejores referentes.

A veces dar un paso atrás es la salida para ir hacia adelante, lo hizo Falcao, quien está demostrando en la temporada actual su vigencia con números que invitan nuevamente a soñar, el mismo Falcao del que José Mourinho manifestó “es un jugador que venimos siguiendo desde que estaba en Atlético de Madrid” cuando iba a ser fichado por el Manchester United, el mismo jugador al que Mourinho no dio continuidad a pesar de afirmar “si de mí depende que Falcao retome su nivel voy a colaborar en eso”, su colaboración fue como la de Zidane a James, enviarlo a la banca y darle pocos minutos de juego.

Hay otros rumbos muchachos, no únicamente lo que hubo después del ya lejano Mundial de Brasil, hoy está más cerca el Mundial de Rusia y si queremos clasificar y si ustedes desean volver a mostrarse la solución es simple, más fútbol y para ello posiblemente sea requerido dar un paso atrás para en 2018 dar dos o tres pasos hacia adelante.

PD: Aún podemos soñar con la clasificación a Rusia 2018, es una cuestión de concentración y de buen proceso de selección, a los que estén en mejor nivel. Vivamos la fiesta del fútbol en paz. #NoMásViolenciaEnElFútbol.

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