Ante la inminente liquidación del programa de salud de la Caja de Compensación Familiar de Córdoba la cual prestará sus servicios con total normalidad hasta el 31 de marzo, el Superintendente Nacional de Salud aseguró las IPS están en el deber de brindar la atención a los afiliados de Comfacor.
No obstante, muchos de sus usuarios denuncian la falta de atención y retrasos en la prestación del servicio de salud y por si fuera poco también se presenta la no entrega de medicamentos.
En tal sentido, el superintendente Fabio Aristizábal, señaló que «Comfacor debe continuar los tratamientos y autorizaciones de sus afiliados hasta el 31 de marzo y las EPS que los reciban harán lo propio desde el 1° de abril».
“No debe haber traumatismo y mucho menos con pacientes de alto costo que serán reubicados aleatoriamente en las cuatro EPS, pido a los afiliados a que a la mínima vulneración de los derechos se comuniquen con los canales de atención de la Superintendencia y estaremos vigilantes de que todo este proceso se lleve a cabo”, precisó.
Cabe resaltar que, en vista de las numerosas denuncias de los usuarios la Personería de Montería solicitó a la Supersalud crear un mecanismo claro y de esta forma garantizar la prestación de los servicios médicos a los afiliados de esa EPS.