Por: Jassir Henrique Urieles Arévalo Intendente Jefe Policía Nacional de Colombia
El cinco de noviembre de 2018, es la fecha oficial para celebrar el aniversario de la Policía Nacional de los colombianos; nuestra respetada y valorada institución cumple 127 años de existencia, edad que cualquier entidad – sea pública o privada – anhelaría tener.
Para el Departamento de Policía Córdoba y Metropolitana de Montería, no será de fiestas o jolgorios porque su compromiso con la seguridad y la convivencia ciudadana será mucho más que sus preocupaciones individuales; es lo que en términos de marketing político llamaría posiciones diferenciales (dar beneficios comunes y no atributos particulares), y eso es lo que definitivamente hace que el personal que la conforma y nosotros como Colombianos que recibimos el servicio nos conectemos a ella, respetándola, valorándola, entendiéndola y acompañándola siempre, para que continúe por mucho más tiempo en nuestra sociedad.
Decimos que nuestra Policía está desde la época colonial del siglo XVI con Los Zaques, Zipas y Güechas (caciques Muiscas), hasta la conformación de los alguaciles o guardias peajeros; también en el siglo XVII con la creación de los serenos para la vigilancia de sus calles, posteriormente en el siglo XIX con el general Francisco de Paula Santander creando la policía secreta para detectar los enemigos e intenciones en contra de la Independencia Colombiana, igualmente la llegada de la primera misión policial francesa, al mando del Comisario Juan María Marcelino Gillibert para capacitar los serenos y formar a quienes serían los primeros Agentes de policía en Bogotá, y un año después la Policía Nacional de Colombia.
El contexto del siglo XX impulsó en la Institución el fortalecimiento y reconstrucción de su filosofía, su cultura profesional, y su rol frente al ciudadano, ampliándose sus sedes universitarias, tanto en infraestructura física como curricular; es así que tanto la profesionalización policial, como su sistema de inteligencia organizacional y para el servicio, le ha permitido afrontar las crisis institucionales y amenazas al Estado Social de Derecho y la convivencia ciudadana, recibiendo en el siglo XXI logros y reconocimientos a nivel nacional e internacional.
Esta fuerza de policía, hoy referente positivo internacional, ha evolucionado con las demandas de la sociedad, adaptándose a los cambios que la época exige para continuar siendo la Policía Nacional de los Colombianos; actualmente es considerada uno de los mejores servicios de policía en el mundo; el alto nivel de profesionalización de sus integrantes le ha permitido el afianzamiento y el liderazgo en la construcción teórica y práctica del servicio de policía frente al ciudadano; también ha ocupado status, participación, opinión e incidencia en las decisiones gubernamentales para que en Colombia se garanticen los fines esenciales del Estado, sin dejar de un lado, el sentido de dignidad y respeto del ser humano, las instituciones y el medio ambiente.
En esta región, también tenemos el orgullo de contar en todos los municipios con el servicio de la Policía Nacional, avanzando su cobertura hacia los corregimientos, acompañado de manera corresponsable con las autoridades, instituciones y comunidad, aportando en el marco del respeto a la elevación positiva de la cultura ciudadana, e impulsando transformaciones históricas que la Policía Nacional y la comunidad demanda para el logro y mantenimiento de la convivencia. El hecho que la Policía Nacional de los Colombianos logre sus 127 años, es una muestra que su existencia no es producto del azar histórico, es el reflejo del trabajo y empuje de los colombianos y colombianas que la integraron en sus diferentes generaciones; de aquellos que están convencidos que hay escenarios de convivencia mucho mejor del que se experimenta en cada época, y de su lucha por aportarle a las generaciones futuras una patria prospera, una institución confiable y una cultura basada en el respeto y dignidad del ser humano, inspirados en usted.
¡Larga vida Policía Nacional! Montería, Córdoba, Colombia; 2017