Los Yihadistas de Cispatá

Los Yihadistas de Cispatá

«Ante el compromiso adquirido de escribir para el diario digital La Lengua Caribe, el atentado terrorista que quieren perpetrar en Cispatá me inspiró a escribir unas líneas hasta altas horas de la noche, creo que hice lo que me nació del  corazón»

roberth-angulo-e1471881931936-150x150Por  Robert Angulo

Los atentados del 11 de septiembre de 2001, de los que el mundo aún no se repone, fue una serie de cuatro atentados terroristas suicidas, cometidos contra la máxima potencia mundial los Estados Unidos, hechos perpetrados por 19 miembros de la red Yihadista Al Qaeda, mediante el secuestro de aviones comerciales que fueron impactados contra diversos objetivos, causando la muerte alrededor de 3 mil personas y dejando a otros 6 mil  heridas, así como la destrucción en Nueva York de todo el complejo de edificios del World Trade Center (incluidas las Torres Gemelas) y graves daños en el edificio del Pentágono.

No me cabe la menor duda que este episodio negro de la historia mundial reciente, ha sido el ataque masivo de dimensiones devastadora más grande en contra de los Estados Unidos. La red Al Qaeda durante muchos años trabajo silenciosamente para dar el gran golpe, estremecieron al mundo y lograron parte de sus objetivos, al final el personal suicida murió en su ley y su autor intelectual Osama Bin Laden, fue dado de baja a los pocos años de consumado el acto terrorista.

Desde hace algunos años, se viene gestando lo que yo he denominado «un ataque terrorista» al Municipio de San Antero, varios empresarios vienen concertando la construcción de un muelle de carbón en la bahía de Cispatá, paradójicamente parecen contar con el apoyo de la Corporación Autónoma Regional de los Valles del Sinú y San Jorge de Córdoba (CVS), entidad encargada de velar por la protección y conservación de esta riqueza y reserva natural.

Acá no se usan los aviones ni los atacantes suicidas para perpetrar «el acto terrorista», pero si existen los socios capitalistas, gerentes de constructoras, inversionistas de dudosas y poderosas chequeras, buscadores de tesoros, se hace de cuanta leguleyada jurídica y el asocio concertado entre un grupo de personas, no sé si el mismo número (19) que actuaron en el 11-S, para acabar con el sustento de más de 3.600 familias (perjudicadas directamente), y exterminar a todo el ecosistema marino que hoy poseemos, situación que al final los convierte en unos verdaderos asesinos del medio ambiente y del pueblo.

La desolación, la tristeza, y la angustia, que se vivió en el 11-S no quiero que se repita en Cispatá, si permitimos que se construya ese puerto carbonífero, solo traeremos a esa zona, muertes, prostitución, daños en la salud, daños ambientales, además del fenómeno del narcotráfico, porque está plenamente demostrado que el Gobierno Nacional ha resultado ineficiente en su lucha antidrogas, hoy las zonas portuarias existentes en el país, se han convertido en los más grandes despachaderos de alcaloide, ante la falta de severos controles por parte de las autoridades.

La revocatoria emitida por la CVS, que revive la licencia ambiental y suspende sus efectos hasta tanto se realice la consulta previa, a la Sociedad Portuaria Gráneles del Golfo S.A. además de ser un exabrupto o adefesio jurídico, es un claro mensaje de lo que quieren y pretenden estos señores, el cual es la construcción de dicho puerto de carbón a como dé lugar en esa zona estratégica del Golfo de Morrosquillo.

Este es solo un round que se pierde y como en la disciplina del boxeo el combate dura 12 asaltos, al final estoy seguro que saldremos vencedores, así como David venció Goliat, muy a pesar de las situaciones adversas, por que recuerden que un pueblo unido jamás será vencido, por eso acudiremos a todas las instancias que sean necesarias e incluso a la protesta pacífica y estableceremos un plantón con los más de 32.000 mil habitantes con que contamos en este hermoso terruño llamado San Antero, con tal de defender lo que Dios y la naturaleza nos regaló.

Estas actuaciones no pueden quedar en la impunidad, jamás debemos callar, tenemos que actuar para defender lo nuestro, a los Yihadistas de Cispatá que se han concertado para masacrar a la Bahía junto con sus habitantes, se les olvida que los delitos ambientales ahora son juzgados por la Corte Penal Internacional y allá en ese órgano jurisdiccional al que tanto le teme Timochenko y sus secuaces, sí que les esperará un triste final, como también lo tuvieron aquellos protagonistas del 11-S.

Quiero terminar estas líneas con esta frase de Mahatma Gandhi «No me asusta la maldad de los malos, me aterroriza la indiferencia de los buenos».

A la carga Pueblo.

Un comentario sobre «Los Yihadistas de Cispatá»

  1. Agradecer y acompañar toda iniciativa en contra de esta megaobra , que no compensaría los empleos , una pésima visión de desarrollo no sostenible ante el daño ecológico y social…!!!!!! Mas difusión de lo nefasto de esa construccion. Y acciones contundentes !!!!

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