Los hechos ocurrieron posterior a la celebración del matrimonio del hombre de 50 años, cuando llevó a la joven a la habitación nupcial y la obligó a tener relaciones sexuales.
Serían altas horas de la madrugada, cuando el hombre se aprovechó del estado de embriaguez de su hija de 20 años, para incitarla a tener sexo y aunque la joven se rehusó, de manera de violenta la violó.
El caso ocurrió en una finca ubicada en Kolding, Dinamarca y según las autoridades, la víctima no pudo defenderse de la agresión debido a su estado de embriaguez.
A los días, el padre de la joven le envió varios mensajes en los que le pedía perdón por lo sucedido y se excusó asegurando que la había confundido con su esposa.
Lo extraño, es que una de las audiencias judiciales, el sujeto aseguró no recordar nada de lo ocurrido la noche de su boda y negó haber cometido la violación.
Sin embargo, el hombre fue encontrado culpable de abuso sexual y lo condenaron a 2 años y 6 meses de prisión.