Todo había resultado impecable durante la visita del papa Francisco a Colombia. Sin embargo, en Cartagena se registró el único ‘lunar negro’ de la jornada, pues la comunidad se quejó del desorden que se registró paraq el acceso a la misa que oficiaría en los patios de la Terminal de Contenedores de Cartagena, Contecar.
Desde las primeras horas de la mañana se inició el acceso al lugar, previsto para que recibiera a cerca de 285 mil personas, pero varios de los encargados de la logística no sabían el sitio exacto porque el que debían entrar las personas que tenían su boleta.
La entrada era gratuita, pero en cada Diócesis habían entregado las boletas de acceso. Sin embargo, cuando hacían una fila y llegaban a la puerta, les decían que era por otro lugar.
Eso hizo que se caldearan los ánimos de algunos de los asistentes que habían viajado desde otras ciudades de la costa para poder asistir a la celebración con el Papa.
Algunos asistentes denunciaron que en algunas áreas había sillas desocupadas por fallas en logística y que en otras estaba la gente tirada en el piso porque habían sido insuficientes.
De Montería y Córdoba viajaron cerca de 10 mil personas que debían ingresar a las diez de la mañana al lugar y por ello salieron desde las tres de la madrugada. Sin embargo, algunos tuvieron problemas durante el acceso.
Finalmente, todos pudieron asistir al multitudinario evento, escuchar un mensaje de paz y reconciliación y recibir la bendición del Papa antes de regresar nuevamente al Vaticano.