El Fiscal ilusionista

El Fiscal ilusionista

Por Robert Angulo Santos.

Roberth Angulo

El inicio de la gestión del  Fiscal General, Nestor Humberto Martínez, era prometedor.  La lucha contra el crimen parecía el camino, las capturas de varios personajes con el paso de los días presagiaban un cambio sustancial en una institución muy cuestionada. En verdad este Fiscal nos ilusionaba, pero algo me decía que esperara, que solo el tiempo sería mi único aliado para calificar las actuaciones del nuevo piloto del ente acusador.

Sin embargo siempre he tenido mis dudas con esos funcionarios mediáticos, porque  al final su gestión o resultados se traducen en deficientes o malas, traduciéndose en un verdadero fracaso. Sus actuaciones posteriores a la de sus inicios y en especial en el caso de Odebrecht frente a los dineros para la campaña presidencial del 2014 parecen confirmar mi percepción, a pesar de todo esto, aún es muy prematuro calificarlo de fondo.

Cuando se dio traslado al Consejo Nacional Electoral para que investigarán si ingresaron o no recursos de la cuestionada firma internacional Odebrecht a la campaña de Santos presidente, mis dudas empezaron a disiparse, su actuación parecía un chiste inentendible, por lo siguiente:

1. El envío de la investigación al CNE ( Consejo Nacional Electoral) en el caso de ingreso de dineros a la campaña de Santos, se debió a que, a juicio del fiscal Martínez, no existían motivos fundados para iniciar un proceso penal, por qué según él se trataba de delitos electorales, lo cual no era de su ámbito o competencia. ¡Inaudito!

Es como decir que la Fiscalía no aperturara las investigaciones con los ingresos de los dineros calientes del cartel de Cali a la campaña de Samper, por qué no se estructuraba ninguna conducta delictiva y no era más que una violación de topes de campaña de competencia de aquel órgano.

2. Ningún sentido tuvo haber trasladado la investigación al CNE, pues una cosa son los dineros que se reportan a esta entidad, que ingresan a las campañas de forma legal y no violan los topes establecidos y otra muy distinta los dineros que nunca se reportan de las campañas electorales y que solo la justicia penal podría determinar su ilegalidad.

3. La principal investigación que debió adelantarse fue la de carácter penal, por la ilicitud de los dineros producto de los sobornos de Odebrecht que hoy son materia de investigación por la cual se han ordenado varías capturas.

Pregunto, ¿será alguien muy torpe para reportar topes superiores  a los establecidos  para las campañas política, y   determinar el carácter de ilegalidad de esos recursos?

Las investigaciones en nuestro país no tiene ninguna reserva sumarial y eso cada día entorpece más los procesos, las contradicciones están a la orden del día, por eso la fiscalía debe ser más prudente y cautelosa al momento de emitir declaraciones, debo recordarle al Fiscal que él no está actuando como político ni actor de televisión que su función es otra..

Apenas iniciando su periodo en la fiscalía comienzan los cuestionamientos a Martinez Neria, el hombre parece que fue por lana y salió trasquilado, las denuncias de Robledo son graves, en el caso de marras, actuando con exceso de protagonismo mediático, encendió el fuego y quiso apagarlo con el cambio de versión, tarde, pero quizás recordó que en Colombia estos casos no se fallan con justicia sino por conveniencias políticas.

Por eso estoy casi completamente seguro que el resultado final, de este capítulo que ha indignado a la Nación, será muy parecido al del proceso 8.000, los Botero, Medina irán a la cárcel y los impolutos libres, diciendo «si ingresaron dineros a mi campaña fue a mis espaldas».

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