Los cuatro crímenes ocurridos en las últimas 24 horas en los municipios de Puerto Libertador y Montelíbano son por ajuste de cuentas. Tres de ellos tenían anotaciones judiciales por narcotráfico y extorsión.
Así lo confirmó el comandante de Policía de Córdoba, coronel Engelbert Grijalba, al terminar el consejo extraordinario de seguridad convocado por el gobernador Edwin Besaile.
En el consejo donde además estuvieron presentes el comandante de la regional seis de la Policía, general Carlos Rodríguez; el comandante de la XI Brigada, coronel Óscar Leonardo Murillo; los alcaldes de Valencia, José Gómez Ramos; de Montelíbano, Francisco Alean Martínez, y el secretario de Gobierno Departamental, Juan José González, se hizo un análisis detallado de la situación y se estableció que tres de ellos tenían antecedentes judiciales.
El gobernador de Córdoba, Edwin Besaile, pidió mayor presencia de la fuerza pública en el área y dijo que una de las causas que está generando muertes y violencia es la actividad relacionada con el narcotráfico y los cultivos ilícitos.
Como se recordará en las últimas 24 horas fueron asesinados Hernán Agámez Flórez, de 43 años, miembro de la Asociación de Campesinos del Sur de Córdoba y tres personas más identificadas como Everto Julio Quiñones Miranda, hijo de un presidente de la Junta de Acción Comunal, sindicado de extorsión; Fredy Javier Cogollo Mora, con anotaciones por tráfico y porte de estupefacientes, y Marceliano Pastrana Fernández, quien también tenía anotaciones por tráfico de estupefacientes.