Una mujer que fue declarada como muerta en el hospital del Oeste de la ciudad de Barreiras, Brasil, resultó que estaba viva y duró más de 10 días intentando salir de la tumba pero infortunadamente murió en el intento.
Cuentan los medios locales que a la mujer identificada como Rosangela Almeida dos Santos, de 37 años, la llevaron a la bóveda porque tuvo un shock séptico (infección generalizada) el pasado 29 de enero, en vista de que los profesionales de la salud la declararon sin vida, su familia le dio cristiana sepultura.
Sin embargo, varias personas que aseguraron oír gritos y golpes desde la sepultura pero pensaron que eran niños o algún bromista que quería asustar a la gente.
Natalina Silva, una de las testigos dijo, “oí unos golpes, pero pensé que era una broma de los niños que se la pasan jugando dentro del cementerio. Cuando escuché unos gemidos salí corriendo y llamé a la familia”.
Inmediatamente se trasladaron al campo santo y sacaron el ataúd, donde todos quedaron perplejos al ver que el cuerpo de la mujer estaba en una posición distinta a como la dejaron.
“Trató de abrir la tapa, incluso se notaba que había intentado clavar las uñas. Sus manos estaban heridas como si hubiese tratado de salir”, comentó Germana de Almeida, madre de Rosangela.
Las autoridades manifestaron que iniciarán una investigación para esclarecer los hechos.