Desesperado y angustiado se encuentra Gerardo Luis Padilla Oviedo, padre de María Paz Padilla Madera, quien nació de 8 meses en una clínica de Montería, el pasado mes de mayo, padeciendo el Síndrome de Patau, una enfermedad incompatible con la vida.
A pesar, de esta difícil enfermedad, la pequeña se encuentra luchando por su vida y le fueron autorizadas remisiones médicas con los especialistas que deben atender el caso, sin embargo, de acuerdo con Padilla Oviedo, la Nueva EPS, se niega a brindarle los servicios necesarios a su hija y así mismo les exige el traslado inmediato de su hija a una clínica de cuarto de nivel.
La pequeña guerrera, se encuentra actualmente en la Unidad de Cuidados Intensivos de la Clínica Montería, y desde hace quince días le fue autorizado el traslado a un centro médico de mayor complejidad, pero la EPS asegura dada las condiciones del caso, el traslado a una institución de cuarto nivel no representa ningún tipo de cambio en el pronóstico y, por el contrario, puede poner en riesgo a la menor.
El padre de la pequeña manifiesta que frente a la situación de su hija, ha habido negligencia por Nueva EPS y que él ha luchado por mantener con vida a su menor, aun cuando la entidad le ha negado la debida atención médica.
Gerardo Padilla, también tuvo que costear un neuropediatra para que valorara a su hija, servicio por el cual debería responder la EPS.
Por su parte Nueva EPS, señaló en un comunicado que a la menor se le está brindando el acompañamiento necesario, en contraste el padre de la pequeña señala el incumplimiento de la entidad y asegura agotará los recursos para luchar porque su hija siga con vida.
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