El suceso ocurrió este lunes en el parqueadero del aeropuerto de Barranquilla, Ernesto Cortissoz, donde una bebé quedó encerrada sola en un taxi, luego de que sus padres la dejaran dormida en el vehículo y el conductor se bajara sin darse cuenta que la pequeña quedó adentro.
Los gritos en medio del llanto de la pequeña de un año de edad, fue lo que alertó al personal de seguridad del parqueadero, que auxilió a la menor que se quedó sin ventilación y con las ventanas arriba cuando la temperatura estaba en unos 35 grados centígrados.
El personal tuvo que romper uno de los vidrios del carro para poder sacar a la menor que posteriormente fue llevada hasta sanidad aeroportuaria para que la valoraran.
Según información entregada por la Policía, los padres explicaron que “contrataron el servicio para recoger a un familiar que llegaba al aeropuerto” y se tuvieron que bajar “para verificar la llegada del viajero”.
El taxista también se bajó del auto mientras esperaba a los clientes, sin embargo no tendría conocimiento de que la niña había quedado en el auto dormida.
La menor finalmente quedó bajo protección del ICBF, mientras la situación se aclara totalmente.