Por lo menos unas 70 mujeres cabezas de familia protestaron por lo que ellas consideran una «persecución» por parte de las autoridades municipales, lo que llevó a la suspensión del servicio de motocarros que ofrecía la empresa Metrosinú de manera gratuita a todos los monterianos.
Como se sabe el servicio era ofertado a los usuarios que se les dificultaba el acceso al medio de trasporte público por estar retirados de los paraderos de los buses.
Con pancartas le pidieron al alcalde de Montería Marcos Daniel Pineda García «alcalde no nos dejen sin empleo somos madres cabeza de hogar».
De acuerdo con Hector Frasser, gerente de Metrosiní se vieron obligados a tomar esta decisión de suspender el servicio de motocarros. «ante el trato y la persecución que sufrían por parte de la Policía y de la Alcaldía de Montería que , no quiere que se siga prestando este servicio que beneficia a más de 5 mil ciudadanos y a 70 madres cabeza de familia que son quienes conducen los vehículos».
Explica Frasser que «Ha sido una guerra constante con la administración municipal y con la Policía porque ellos aducen que esto es un servicio ilegal, aun cuando la Superintendencia de Trasportes realizó la respectiva inspección al servicio y determinó que “no era ilegal porque no estábamos cobrando y no se puede considerar servicio público de trasporte»,
Bajo esa figura jurídica Metrosinú continuó prestando este servicio durante más de cinco años beneficiando a cientos de personas, haciendo mucho más fácil el acceso al medio de trasporte público en la ciudad..
Según el gerente de la transportadora son más de cien millones de pesos los que han pagado en multas de manera injustificada porque de manera unilateral la Policía considera que esto es un medio de trasporte, pero curiosamente la empresa Metrosinú no cobra por este servicio.
Ante la suspensión del servicio los más afectados son los habitantes de barrios como La Pradera, Edmundo López, Los Nogales, Villa Jiménez y Vallejo, entre otros.